Del quiosco a la librería

Lees lo que escribe y te puedes echar a reír o a llorar. Tiene ese don que solo algunos tienen de hacerte protagonista de sus propias historias. Le suele escribir a ellas. Pero siempre nos menciona a nosotros. Te pone a parir, a su Él, a nosotros, y encima te mueres de risa imaginando la situación. Cuenta historias. Cuenta anécdotas. Cuenta su día a día. El día que se perdió por culpa de la interminable conversación con su amiga. El partido de pádel. El viaje a Lisboa para ver a su Atleti. El día que su hija le robó el pantalón. Lo cuenta todo.

Nos habla de fundaciones, de ONG, de niños que lo pasan mal, de madres que lo pasan peor. Nos cuenta lo que necesitan. Nos pone fácil ayudar. Lo consigue. 

Se vuelca con sus lectores. Es su propia community manager. Contesta a todos y cada uno de los comentarios que le hacen. Se ríe. Llora. Se troncha. Lo hace saber en sus respuestas. Pasan días y ves como crece su área de comentarios. Leída por muchos. Comentada por todos. 

Y de repente desaparece. Silencio. Vacío. Último post de hace dos meses. Y de repente reaparece. Vuelve. Aluvión de comentarios. Aluvión de «me gusta». Sus lectores comparten su último post. Atando cabos descubres que el silencio se debe a algo más de lo que cuenta. Deja de escribir en el periódico donde llevaba más años de los que aparenta tener dándolo todo. El periódico donde empezó a desnudarse públicamente. El periódico del que no hacía más que hablar maravillas de él. Todo tiene un fin. No lo cuenta. La imagino incapaz de hablar mal de su casa. De su otra casa. Humildad. Cordura. Prudencia. 

Sí cuenta que pronto se publicará su primer libro. Un libro que estará lleno de ella. De sus aventuras y desventuras que nos contaba. Supongo el libro. Quiero pensar que será como sus columnas. Como sus posts de las redes sociales. Quiero pensar que el libro será, en definitiva, lo que es ella: buen humor, alegría y optimismo. Quiero pensar que ese libro, que compraré en cuanto el encargado de la librería lo saque de la caja de cartón remitida por la editorial, quiero pensar, digo, que ese libro será lo que es su autora, Marta Barroso. Del periódico al libro. Del quisoco a la librería. Pero siempre ella. Siempre tú. Ojalá. 

Si usas facebook puedes encontrarla aquí: https://www.facebook.com/martabarrosoperales donde define su página así: 

Aventuras y desventuras de una mujer trabajadora de mediana edad, fiel al «martirmonio» y con dos hijos «adorablemente adolescentes».

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